Querido dos mil veinticinco.
Tal vez un día como hoy lo debido es reclamarte, poner sobre ti el peso de mis expectativas acerca de lo que se supone que mi mente a interiorizado como lo que se define como: “un buen año”.
Tal vez este año dos mil veinticuatro, he aprendido que tal vez se puede encontrar la tranquilidad cuando no se persiguen expectativas. Tal vez a comienzos de año solo hay que describir propósitos que uno sabe que es capaz de conseguir.
Porque tal vez este año me ha enseñado a sentir el: “¿y para que necesito más?
Para que necesite más si he tenido a mi lado a personas que me quieren y que me he dedicado todo el año a querer. Si he vivido tranquila. Si mi familia está bien. Tengo la suerte de sentir que tengo otra familia junto a mis amigos. Si vivo en una ciudad que me gusta, teniendo la sensación constante de que estoy en mi lugar. Si me puedo permitir volver siempre que quiera a casa de mis padres.
Para este año dos mil veinticuatro había pedido una cosa. Estar agradecida por las cosas positivas de mi vida. Fue mi primer propósito. Supongo que puedo decir que lo he cumplido.
No sé que me deparará este año, pero solo quiero estar de nuevo cerca de todas las personas por las que he sido feliz este año.
Tal vez he venido a la vida a eso, simplemente a dedicarme a querer.
Gracias por seguir leyéndome un año más.
biquiños, Valu <3
(y si, he escrito con mayúsculas)
Feliz año Valu🌟✨
Feliz año nuevo Valu!!!! que bonito querer❤️❤️❤️